¿Qué es un FibroScan?
Un FibroScan es un examen del hígado similar a una ecografía, que utiliza tecnología de elastografía transitoria controlada por vibración para evaluar la salud del hígado de forma no invasiva. El procedimiento dura unos 10 minutos y proporciona resultados inmediatos.
¿Quién se beneficiaría de un FibroScan?
Los pacientes con uno o más de los siguientes factores de riesgo tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedad del hígado graso, que a menudo no presenta síntomas, lo que hace que estos factores de riesgo sean cruciales para la detección:
¿Por qué se realiza FibroScan?
Cuando otras pruebas sugieren disfunción hepática, su médico puede recomendarle un FibroScan para una evaluación más precisa. A diferencia de una biopsia de hígado, un FibroScan es rápido, indoloro y se realiza en un entorno clínico. Ayuda:
¿Cómo se realiza FibroScan?
El procedimiento es sencillo. Usted se acostará boca arriba con el brazo derecho levantado detrás de la cabeza. El técnico aplicará un gel a base de agua en la piel del lado derecho de la caja torácica y luego utilizará una sonda con una ligera presión. El examen implica diez mediciones consecutivas en el mismo lugar y no es doloroso.
¿Qué sucede después de un FibroScan?
Después del examen, podrá volver a comer, beber y realizar sus actividades habituales inmediatamente. No se necesita tiempo de inactividad ni período de recuperación. Un investigador del estudio o un médico interpretará el informe de FibroScan, revisará los resultados con usted y le brindará recomendaciones personalizadas de estilo de vida para realizar un seguimiento con su proveedor de atención primaria.
Cómo prepararse para un FibroScan
No debe comer ni beber nada durante las tres horas previas a la prueba.